Viajar en el tiempo puede ser una tarea muy difícil de logras a nuestro simple entendimiento, pero al parecer si es posible escarbando y escudriñando los restos arqueológicos bajo las cuevas inundadas en Quintana Roo, al sur de México; en donde se han localizado las fogatas de los primeros habitantes del continente Americano.
Según lo han revelado en un comunicado un equipo de científicos que contó con investigadores del Instituto de Geología (IGL), con el apoyo del del Instituto de Investigaciones Antropológicas IIA, en conjunto con integrantes del Instituto de Antropología e Historia (INAH); han localizado los vestigios más antiguos de fogatas usadas por los primeros habitantes del continente americano, en la cueva inundada Aktun-Ha, cerca de Tulum, Quintana Roo, al sur de México.
Este descubrimiento realizado gracias a los arqueólogos de la Subdirección de Arqueología Subacuática del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), que inspeccionaron a 30 metros bajo el agua y unos 100 metros de la entrada, el salón conocido como Cámara de los Ancestros, hallando 15 acumulaciones de carbón, que serían los restos de fogatas.
Por lo cual, los investigadores de la Universidad Nacional de Mexico (UNAM), creen que estos restos arqueológicos hallados dentro de la cueva Aktun-Ha, constituirían los primeros vestigios del uso de fuego de los primeros pobladores de la península de Yucatán al sur del país.
El descubrimiento registra los vestigios más antiguos de los primeros hombres que habitaron el continente americano, unas fogatas con antigüedad de 10 mil 500 años, colocadas en lugares estratégicos que permiten obtener fuego con diversos propósitos como la iluminación dentro de las rutas de la cueva del sistema geológico Aktun-Ha, la cueva inundada más grande del mundo.
La cueva inundada de Aktun-Ha, es considerada la cueva más grande del mundo, un cenote que hace unos 15 mil años no estaba inundado, pero que los procesos geológicos y la subida del nivel del mar, ocasionaron que se inundara y quedara en total oscuridad; dejando ciento de registros históricos de los primeros pueblos del continente americano que las utilizaban antes de su inundación como lugares habitacionales y ceremoniales.
Por ahora, los investigadores han informado que continuaran con sus investigaciones para determinar más datos relevantes que puedan explicarnos con más detalles sobre la utilización del fuego con diversos fines por los primeros hombres que habitaron América.