Un alarmante estudio ha demostrado que el derretimiento de la capa de hielo de Groenlandia podrá generar a futuro un progresivo y acelerado aumento del nivel de las aguas del mar alrededor del mundo mucho más rápido de lo que se tenía pensado.
El estudio publicado en la revista de divulgación científica Science Advances, fue realizado por medio de la recopilación de datos de la campaña aerotransportada Operation IceBridge de la NASA, en la cual se monitorea la regiones polares de nuestro planeta y en especial el polo norte e incluida Groenlandia; Los investigadores determinaron por medio de este monitoreo que en los próximos 200 años, el modelo de capa de hielo muestra que la fusión al ritmo actual podría contribuir hasta 63 pulgadas al peligroso aumento global del nivel del mar de forma muy acelerada.
Sobre el hecho se han pronunciado algunos investigadores del Instituto Geofísico de la Universidad de Alaska Fairbanks, asegurando que esta nueva estimación es un 80 por ciento más alta que las estimaciones anteriores, que pronosticaron hasta 35 pulgadas de aumento del nivel del mar desde el hielo de Groenlandia, algo aterrador debido a que muchas ciudades costeras estarían bajo el agua en pocos años si esto sucede.
Los científicos realizaron un análisis predictivo bajo el modelo de 500 veces hasta el año 3000, para cada uno de los tres posibles escenarios climáticos futuros, ajustando variables clave de la tierra, el hielo, el océano y la atmósfera; algo que al final demostró que los tres escenarios climáticos dependen de la cantidad de emisiones de gases de efecto invernadero en la atmósfera en los próximos años.
Además, los científicos creen que si no controlamos las emisiones de gases de efecto de invernadero es más que probable que la capa de Groenlandia se derrita en un centenar de años más adelante y genere un aumento del nivel de las aguas del mar de 17 a 23 pies, sepultando así muchas ciudades costeras bajo el agua.
Por lo cual, los investigadores creen que todavía hay tiempo para que los seres humanos tomemos conciencia y protejamos los espacios naturales estratégicos para el mantenimiento de la vida en la tierra y en especial evitemos las emisiones de gases de invernadero a la atmósfera ya que estos son los principales agentes promotores del Cambio Climático y el deshielo en las regiones polares.