
El número de contagiados de la pandemia generada por el COVID-19, sigue aumentando alrededor del mundo de forma muy rápida, hasta la fecha se han registrado más de 335.997 casos confirmados y unas 14.641 muertes de personas afectadas con el virus, del cual, los investigadores ahora saben más y nos están revelando cosas que no sabíamos y nos ponen sobre alerta como la posibilidad de que seamos “portadores ocultos de esta sin saberlo”.
Según un nuevo estudio realizado por especialistas de la Sociedad de Rinología Británica y la Asociación de Otorrinolaringología de Reino Unido, cualquiera persona que experimente una pérdida repentina del olfato podría ser un “portador oculto” del virus SARS-CoV-2 o la enfermedad del coronavirus como suele llamársele, incluso si la persona aún no ha presentado otro tipo de sintomatología.
Los principales síntomas reconocidos en una persona que padece el virus SARS-CoV-2 hasta el momento son la presencia de secreciones nasales, el dolor de garganta, la tos, la fiebre y la dificultad para respirar (en casos graves). Sin embargo, los investigadores han deducido por medio de los análisis de los pacientes en Corea del Sur, China e Italia; que la perdida de olfato podría ser una principal señal para detectar que una persona es un “portador oculto” del virus SARS-CoV-2.
El estudio, también se sustenta en que alrededor de un tercio de los pacientes que dieron positivo con la enfermedad generada por el virus SARS-CoV-2 en Corea del Sur, China e Italia; también informaron una pérdida repentina del olfato, conocida como anosmia o hiposmia. Por lo cual, se podría considerar a estas personas como sospechosos o probables portadores ocultos del virus SARS-CoV-2, para que de esa forma puedan ser sometidos a las pruebas y así frenar la rápida propagación de la enfermedad en todo el mundo.
Foto principal: Imagen ilustrativa por Battlecreek Coffee Roasters en Unsplash.