Los peces de las cavernas conocidos comúnmente como peces ciegos pertenecen al género Lucifuga, son bastantes difíciles de localizar debido a que habitan en cavernas con ausencia de la luz; sin embargo, esto no ha sido un impedimento para que un equipo de investigadores descubriera a Lucifuga gibarensis, una nueva especie de peces de caverna.
La investigación sobre el descubrimiento de esta fascinante e increíble especie de pez ciego ha sido publicada en la revista de fomento científico ZooKyes, la cual fue realizada por un equipo interdisciplinario de investigadores pertenecientes a la Universidad de La Habana en Cuba, a la Universidad de Copenhagen en Dinamarca, la Universidad de Paris-Saclay, Gif-sur-Yvette de Francia y a la Universidad de Diderot en Paris Francia; los cuales han reportado el descubrimiento de esta nueva especie de pez ciego del genero Lucifuga en la región del este de Cuba.
Los peces Lucifuga, son peces cavernarios descritos por primera vez en 1858, de los cuales actualmente se han reconocido seis especies distribuidas en Cuba, las Bahamas y el archipiélago de las Galápago. La nueva especie ha sido bautizada con el nombre científico de Lucifuga gibarensis, una nueva e increíble especie de pez ciego del género Lucífuga que habita en cuevas ancladoras en la región kárstica del noreste de la isla principal de Cuba.
Los investigadores realizaron una serie de estudios morfológicos de la especie cubana Lucifuga, tomando análisis de 214 muestras de individuos de varias localidades. Al igual, los investigadores tomaron nueve medidas morfométricas utilizando un calibrador Vernier de precisión de 0,05 mm y once recuentos merísticos con un estereomicroscopio novedoso; determinando al final que Lucifuga gibarensis, es una nueva especie dentro del genero de los peces ciegos o Lucifugas.
Al igual, los investigadores han revelado que la nueva especie se distingue físicamente de otras especies debido a que cuenta con ojos pigmentados, vértebras precaudales y diez rayos de aleta caudal; además de un tamaño mayor e sus ojos pigmentados y un número mayor de neuromasts de la línea lateral posterior.
Para los investigadores el descubrimiento ha sido de suma importancia debido a que incrementa el número de las especies de estos peces escurridizos que habitan en ambientes con ausencia de la luz, de los cuales se sabe muy poco por su forma de cohabitar con el ambiente.