Una nueva investigación ha revelado una sustancia química presente en las plantas de sauces que puede actuar de forma positiva contra algunas células cancerosas, incluyendo el neuroblastoma, una forma de cáncer infantil difícil de tratar y con una tasa de supervivencia general de menos del 50 por ciento.
La investigación que fue publicada en la revista de fomento científico Scientific Reports, fue realizada por un equipo de investigaciones del centro Rothamsted Research y la Universidad de Kent en el Reino Unido, los cuales han descubierto en el tronco y las hojas de la planta de sauce contienen la miyabeacina, una sustancia química que puede servir como una posible cura para diversos tipos de cáncer.
Los investigadores descubrieron que la miyabeacina, una sustancia química contenida en los troncos y las hojas de los árboles de sauce actúa destruyendo varias células cancerosas. Como es el caso del neuroblastoma, una forma de cáncer infantil difícil de tratar y con una tasa de supervivencia general de menos del 50 por ciento de los afectados.
Al igual, los científicos han hecho saber que esta sustancia química llamada la miyabeacina, también tiene las capacidades de actuar contra algunas células cancerosas que son resistentes a otros medicamentos y tratamientos contra el cáncer, por lo cual podría considerarse como una fuente potencial para el desarrollo de un medicamento contra el cáncer.
Como es el caso del cáncer de mama, este componente químico natural miyabeacina, hallado en las plantas de sauces actúa contra varias líneas celulares lo cual le permite al organismo humano producir células sanas después de la destrucción de las células cancerígenas por la miyabeacina. Algo que funciona de forma similar en el cáncer de garganta y ovario.
Los investigadores han hallado en esta sustancia química (miyabeacina) dos grupos de salicina en un glucósido producido en la corteza del sauce, que es un componente activo de la aspirina (acetilsalicilato) que actúan con propiedades anticancerígenas, por lo cual, los investigadores continuaran con sus estudios más amplios para desarrollar un fármaco que les permita la producción de miyabeacina de sauce cultivado para tratar pacientes con cáncer.