
Una de las incógnitas que había acompañado a la sociedad en general a sido resuelto, la muerte de los tripulantes del primer submarino que entró en combate en la historia de la humanidad; estudio de un grupo de científicos estadounidenses publicado en la revista PLOS ONE.
El submarino confederado H.L. Hunley fue subido a la superficie en el año 2000 después de pasar un siglo y medio sumergido aproximadamente, y con el trajo dentro de su oxidado casco los restos de sus ocho tripulantes. Los huesos se encontraban en sus puestos de combate correspondientes y no presentaban muestras de haber sufrido heridas de bala o de metralla, lo cual inmediatamente dio lugar a varias teorías sobre la muerte de los marinos.
Los investigadores determinaron que el casco del Hunley demostró que ninguno de los tripulantes trató de abrir las escotillas de escape, accionar las bombas de achique o soltar los lastres del submarino desesperadamente en señal de angustia.
Los estudios realizados por los científicos de la Universidad de Duke, en los Estados Unidos ha concluido que un fenómeno conocido como ‘estallido pulmonar’ provocó la muerte de la tripulación cuando los explosivos del sumergible estallaron bajo el agua. El efecto de la explosión logró el objetivo de destruir el barco enemigo, pero al mismo tiempo destruyó su tripulación; Con esto queda resuelto un gran misterio en la historia de los Estados Unidos y se aclara una de las incógnitas más grandes sobré la desaparición de militares durante la guerra civil.