Un hallazgo fascinante emerge desde las profundidades de la selva del Petén, Guatemala. Arqueólogos del Centro Nacional para la Investigación Científica de Francia (CNRS) descubrieron parte de un antiguo tablero de juego maya incrustado en el piso de una estructura residencial del sitio arqueológico de Naachtun, una de las ciudades mayas más enigmáticas del periodo Clásico.
Un tablero elaborado con más de 475 piezas en mosaico
El tablero, datado alrededor del siglo V d.C., fue construido con más de 475 fragmentos de cerámica roja y naranja, cuidadosamente dispuestos en un patrón rectangular de aproximadamente 76 cm de ancho por 110 cm de largo.
Los investigadores Julien Hiquet y Rémi Méreuze sugieren que el edificio donde se encontró el mosaico pudo haber pertenecido a una familia de élite o funcionar como un pequeño centro administrativo.
Este tipo de tablero corresponde al juego conocido como patolli, registrado en fuentes históricas y códices mesoamericanos. Aunque se han identificado versiones más pequeñas del juego dibujadas o talladas en murales, bancas y templos mayas, su datación precisa siempre ha sido un desafío. Este hallazgo, por estar integrado en el piso de una estructura fechada con claridad, ofrece una referencia arqueológica sólida y excepcional.

sitio arqueológico maya en Petén, Guatemala
¿Qué representaba el patolli para los mayas?
El patolli no era solo un entretenimiento: se cree que estaba vinculado con rituales, apuestas y prácticas adivinatorias, y que representaba procesos simbólicos asociados con el destino y el movimiento de la vida. La presencia de un tablero tan elaborado indica la importancia social y cultural del juego dentro de las élites mayas de Naachtun.
Un hallazgo que abre nuevas preguntas
Además de su valor histórico, el descubrimiento permite explorar cómo los juegos formaban parte de la vida cotidiana, la política y la espiritualidad en las ciudades mayas del Clásico. También invita a reconsiderar la distribución social de estos espacios de ocio ritualizado dentro de los hogares de élite.
Este estudio ha sido publicado en Latin American Antiquity, donde se detalla la arquitectura, materiales y contexto del hallazgo.