Polillas bogong moth @ Vik Dunis / iNaturalist, CC BY-NC
Utilizando las estrellas como si de un marineros o explorador se tratara, para escapar del intenso calor australiano, las polillas bogong moth emprenden cada año un largo viaje migratorio orientándose con las estrellas.
Cada primavera, guiadas por los cielos estrellados, miles de millones de polillas bogong moth vuelan desde el sureste de Australia, migrando a una distancia de hasta 1000 kilómetros para refugiarse en cuevas en los Alpes australianos ante la pronta llegada del intenso calor, lugares que les proporciona un clima ideal para descansar.
En estos lugares, las polillas bogong moth permanecen en un estado de inactividad hasta el próximo otoño. Tiempo en el cual, regresan a sus lugares de cría para reproducir la nueva generación de jóvenes bogong moth que las remplazaran.
Agrotis infusa, conocida comúnmente como la polilla bogong moth, es una especie de lepidóptero ditrisio de la familia Noctuidae nativa de Australia y Nueva Zelanda. En estas regiones es muy conocida popularmente por aparecer en grandes números en edificios públicos en Canberra, la capital de Australia, durante la primavera, tiempo en el cual, está migrando.
Estas polillas cuando están adultas poseen color entre marrón y negro, con una envergadura de alas de aproximadamente entre 40 y 50 milímetros, estado en el cual emprenden esta maravillosa migración, en la cual, vuelan de noche orientándose por medio de las estrellas.
Las polillas bogong duermen durante el calor del verano aferradas a las paredes de cuevas en las Montañas Nevadas de Nueva Gales del Sur @Eric Warrant
¿Como es esto posible?
Un reciente estudio publicado en la revista Nature Universidad de Lund (Suecia), ha demostrado mediante experimentación que estos insectos perciben el campo magnético de la Tierra y que, junto a puntos de referencia visuales o las estrellas, pueden orientarse hasta llegar a los Alpes australianos.
Los investigadores de la Universidad de Lund (Suecia), utilizaron un simulador de vuelo para polillas, en el cual, se imitó un vuelo migratorio proyectado con una imagen tenue del cielo en una pantalla mientras una polilla volaba.
El simulador de vuelo estaba integrado en un sistema de bobinas en 3D que permitía a los investigadores crear un campo magnético cero (un vacío magnético), y así separar la información magnética de la información que obtenían de las estrellas.
Al final, los investigadores determinaron que estos insectos eran capaces de dirigir el rumbo gracias a las estrellas hacia la dirección que les tocaba según la estación, y se desorientaban cuando les presentaban una imagen proyectada en la que las estrellas estaban orientadas al azar.
De alguna forma u otra, la biología de estas increíbles polillas tiene la capacidad de orientarse con los cielos estrellados para encontrar sus lugares de descanso en la calurosa estación de primavera y verano en Australia.