Una nueva investigación de la Agencia de la Aeronáutica el espacio norteamericana (NASA), ha descubierto lo que se considera como el agujero negro mas distante del universo.
Según lo ha informado la NASA, todo se trata de una rara reliquia del universo primitivo: Un agujero negro supermasivo, el cual se estima es el más alejado conocido. Esta bestia que come materia es 800 millones de veces la masa de nuestro Sol, que es asombrosamente grande para su corta edad.
“Este agujero negro creció mucho más de lo que esperábamos en solo 690 millones de años después del Big Bang, lo que desafía nuestras teorías sobre cómo se forman los agujeros negros”, dijo el coautor del estudio Daniel Stern del Jet Propulsion Laboratory de la NASA en Pasadena, California.
El estudio que estuvo vinculados a la combinacion de datos del Wide-field Infrared Survey Explorer (WISE) de la NASA con estudios terrestres para identificar posibles objetos distantes para estudiar, siguieron los telescopios Magellan de los Observatorios Carnegie en Chile; para si obtener mas amplia resolución y certeza del fenómeno en el espacio. El astrónomo de Carnegie Eduardo Bañados encabezó el esfuerzo para identificar a los candidatos de entre los cientos de millones de objetos que WISE encontró que serían dignos de seguimiento con Magellan.
Ademas, los investigadores argumentaron que para que los agujeros negros lleguen a ser tan grandes en el universo temprano, los astrónomos especulan que debe haber habido condiciones especiales para permitir un crecimiento rápido, pero la razón subyacente sigue siendo misteriosa. Este agujero negro recién descubierto devora vorazmente material en el centro de una galaxia, un fenómeno llamado quasar. Este cuásar es especialmente interesante porque proviene de un tiempo en que el universo recién comenzaba a emerger de su edad oscura. El descubrimiento proporcionará información fundamental sobre el universo cuando era solo el 5 por ciento de su edad actual.
“Los cuásares se encuentran entre los objetos celestes más brillantes y distantes conocidos y son cruciales para comprender el universo primitivo”, dijo el coautor Bram Venemans del Instituto Max Planck de Astronomía en Alemania.
El universo comenzó en una sopa caliente de partículas que se separaron rápidamente en un período llamado inflación. Alrededor de 400,000 años después del Big Bang, estas partículas se enfriaron y se fusionaron en gas hidrógeno neutro. Pero el universo permaneció oscuro, sin ninguna fuente luminosa, hasta que la gravedad condensó la materia en las primeras estrellas y galaxias. La energía liberada por estas galaxias antiguas provocó que el hidrógeno neutro se excitara e ionizara o perdiera un electrón. El gas ha permanecido en ese estado desde ese momento. Una vez que el universo se volvió a ionizar, los fotones podían viajar libremente por el espacio. Este es el punto en el que el universo se volvió transparente a la luz.