Describen cuáles son los seres más longevos de la tierra y pueden vivir más de 11.000 años

Matusalén es un histórico personaje bíblico considerado como la persona más longeva en la Biblia, la cual, vivió durante 969 años. Sin embargo, este tiempo no supera los 1000 años, debido a que vivir por más de los 1000 años, es una proeza que muy pocos seres vivos pueden lograr en la tierra.

Aunque parezca imposible, es real que se han documentado algunas criaturas que superan por mucho más los 1000 años de longevidad. ¡He aquí! Hoy te presentaremos las criaturas más longevas que habitan la tierra.

Las almejas quahog del océano ( Arctica islandica ) habitan en el Océano Atlántico Norte. Según las investigaciones, esta especie de molusco bivalvo puede vivir por más de 500 años. La documentación más reciente sobre la longevidad de estos moluscos presento una almeja marina encontrada en la costa de Islandia en 2006, la cual, tenía 507 años, según el Museo Nacional de Gales.

Para los investigadores, esta longevidad se debe a que en las aguas más frías que rodean Islandia, las almejas quahog del océano, tiene un metabolismo más lento y, por lo tanto, crece lentamente haciéndole vivir por más de 507.

Otro de los seres vivos que rompen la barrera del tiempo haciéndose longevos, son los corales negros ( antipatarios ). Los antipatarios o corales negros, por el color de sus esqueletos, son seres marinos relacionados con las anémonas de mar, aunque a simple vista parecen rocas y plantas submarinas de colores. Sin embargo, estos están formados en realidad por exoesqueletos de invertebrados llamados pólipos.

Según las investigaciones, estos pueden llegar a vivir por más de 4.000 años, debido a que poseen pólipos que se multiplican continuamente y se reemplazan creando una copia genéticamente idéntica, lo que con el tiempo hace que la estructura del exoesqueleto del coral crezca cada vez más.

Los corales negros de aguas profundas se encuentran entre los corales más longevos. Los especímenes de coral negro encontrados frente a la costa de Hawái han sido fechados por radiocarbono en 4.265 años.

Las esponjas marinas de vidrio se encuentra en las aguas profundas del océano Pacífico. Al igual que otras esponjas de cristal, construyen su esqueleto con sílice, se alimentan filtrando el agua del mar para capturar plancton.

Los investigadores han descubierto que esto individuos también están formadas por colonias de animales, similares a los corales, y también pueden vivir miles de años. Las esponjas de vidrio se encuentran entre las esponjas más longevas de la Tierra.

Un estudio de 2012 publicado en la revista Chemical Geology, estimó que una esponja de vidrio perteneciente a la especie Monorhaphis chuni tenía unos 11.000 años. Otras especies de esponjas pueden vivir incluso más tiempo.

Turritopsis dohrnii, también conocida como la medusa inmortal, es una especie de pequeñas medusas encontradas en el mar Mediterráneo y en las aguas de Japón.​​ Se llama la medusa inmortal porque potencialmente puede vivir para siempre.

Las medusas comienzan su vida como larvas antes de establecerse en el lecho marino y transformarse en pólipos. Estos pólipos luego producen medusas o medusas que nadan libremente. Los T. dohrnii maduros son especiales porque pueden volver a convertirse en pólipos si sufren daños físicos o mueren de hambre, y luego volver a su estado de medusa.

Las medusas, que son nativas del mar Mediterráneo, pueden repetir esta hazaña de revertir su ciclo de vida varias veces y, por lo tanto, es posible que nunca mueran de viejas en las condiciones adecuadas, según el Museo de Historia Natural, en Londres.

La Hydra, es un género de hidrozoos invertebrados con cuerpos blandos que se parecen un poco a las medusas, son propios de las aguas dulces. Miden unos pocos milímetros y son depredadores, capturando pequeñas presas con sus tentáculos cargados de células urticantes. Tienen un asombroso poder de regeneración, el cual, les brinda el potencial de vivir para siempre.

Estos invertebrados están compuestos en gran parte por células madre, que se regeneran continuamente a través de la duplicación o la clonación, por lo que estos animales no se deterioran a medida que envejecen. Mueren en condiciones naturales debido a amenazas como depredadores y enfermedades, pero sin estos peligros externos, podrían seguir regenerándose para siempre.