El alma y objetivo principal de la astronomía siempre ha sido el encontrar ambientes con potencialidad para el desarrollo de alguna forma de vida como sucede en nuestra tierra, un objetivo que durante décadas pareció ser sombrío e incierto; sin embargo, el descubrimiento del Kepler-1649c, cambia este paradigma debido a que posee ambientes potencialmente habitables.
El nuevo estudio fue realizado por investigadores de la Agencia de la Aeronáutica y el Espacio Norteamericana (NASA), los cuales han detectado mediante la nave espacial Kepler, el exoplaneta Kepler-1649c, un planeta considerado como una segunda tierra ubicado a unos 300 años luz de distancia de nuestro planeta.
Según lo han revelado los investigadores de la NASA, este exoplaneta denominado “Kepler-1649c” es el primer planeta de tamaño similar a nuestro planeta (La tierra), que se descubre orbitando en su zona habitable alrededor de una estrella, dentro de la Vía Láctea. Lo cual, lo convierte potencialmente en un exoplaneta con ambientes que pueden ser muy parecidos al de nuestro planeta o ambientes que pueden ser habitables.
El Kepler-1649c, considerado como una segunda tierra, a unos 300 años luz de distancia de nuestro planeta en la constelación de Cygnus, está ubicado en su zona habitable, una zona denominada como la zona de ricitos de oro por la comunidad astronómica debido a que su distancia de su estrella le podría brindar ambientes propicios para el desarrollo de la vida.
Sin embargo, este exoplaneta orbita alrededor de una estrella enana roja, lo cual podría cambiar muchas ambientes debido a que la intensidad de la luz podría ser menor a la que la tierra recibe de nuestra estrella (El sol). Lo cual, le podría propiciar ambientes parecidos a los de la tierra ero con bajas temperaturas por falta de la luminosidad de su estrella o sol.
Al igual, los investigadores han revelado que el nuevo exoplaneta Kepler-1649c, posee un tamaño muy similar al de la Tierra, tan sólo unas 1.06 veces más grande, por lo que aumentan las expectativas de que este planeta posea ambientes propicios para el desarrollo de la vida, por lo cual, los investigadores continúan con sus investigaciones para descubrir si en realidad este nuevo exoplaneta es un mundo potencialmente habitable como la tierra.
Imagen superior: Ilustración de Kepler. Créditos: NASA Ames/JPL-Caltech/T. Pyle.