Una nueva investigación realizada en Pangolines y en Murciélagos, ha revelado como estos animales poseen algunos virus de corona o coronavirus muy parecidos al virus del Coronavirus SARS Cov 2, el cual transmite la enfermedad del COVID-19 que ha generado miles en menos de tres meses alrededor del mundo.
El esudio que fue publicado en la revista de fomento científico Plos One, fue realizado por investigadores del Instituto Smithsonian, en Estados Unidos; los cuales aseguran haber descubierto seis nuevos tipos de coronavirus que pertenecen a la misma familia del SARS-CoV-2 (que causa el COVID-19), en unas especies de murciélagos.
El estudio que buscaba identificar nuevos tipos de virus que pudieran generar un brote epidemiológico ha detectado la presencia de estos seis tipos de coronavirus parecidos al SARS Cov 2 en los murciélagos birmanos. Pero estos virus son diferentes a los coronavirus que han provocado otras epidemias como la del Síndrome Respiratorio Agudo Severo (SARS CoV-1), Síndrome Respiratorio del Medio Oriente (MERS) o con el COVID-19 que ha provocado la pandemia mundial.
Para el estudio, los investigadores examinaron muestras de saliva y excremento de murciélago en lugares de Birmania, las cuales fueron sometidas a comparaciones de secuencias genéticas de las muestras de murciélagos con genomas de coronavirus previamente conocidos; determinando al final que los virus se encontraron en tres de las 11 especies de murciélagos que se estudiaron en esta región.
Algo que ha vuelto a levantar sospechas sobre la posibilidad de que el virus del SARS Cov 2 que ha transmitido el COVID-19 a los humanos, generando una pandemia mundial que les ha cobrado la vida a más de 115,000 personas alrededor del mundo; fuera primera mente transmitido por murciélagos a Pangolines y de Pangolines a humanos por medio del consumo de su carne.
Sin embargo, los Murciélagos y Pangolines, han convivido generacionalmente con estos virus en medio de la naturaleza. Algo que los excluye de que fueran los verdaderos agentes vectores de esta enfermedad infecciosa en los seres humanos que han tenido contacto tanto con murciélagos y Pangolines, en Asia, África y otras regiones del mundo.
Por lo tanto, estos descubrimientos levantan muchas sospechas injustificadas en estas especies de animales en grave estado de desaparición por la reducción de su hábitat y el comercio ilegal de animales; colocándoles en un mayor riesgo de desaparición del que estaban anteriormente y alistándolo en el triste camino de la extinción de nuestro planeta.