Impresionantes imágenes tomadas por satélites de monitoreo de la Agencia de la Aeronáutica y el Espacio Norteamericana (NASA) y de la Agencia espacial Europea (ESA), han mostrado como la contaminación por dióxido de nitrógeno (NO2), ha descendido rápidamente sobre el cielo de China, como consecuencia a las medidas de cuarentenas en las ciudades por el brote de Coronavirus COVID-19.
Las imágenes que muestran las concentraciones de dióxido de nitrógeno en el aire han cambiado drásticamente desde mitad de enero cuando el brote de Coronavirus (COVID-19) se agudizo, así lo han hecho saber claramente las agencia aeroespaciales norteamericana (NASA) y europeas (ESA).
La primera imagen muestra cómo era el aire de China antes de la agudización del virus, el cual se encontraba altamente contaminado por las emisiones de dióxido de nitrógeno, un gas altamente nocivo, el cual es emitido por vehículos automotores, plantas de energía e instalaciones industriales.
Los investigadores que han presenciado este monitoreo, creen que esto se debe a la desaceleración de la economía China tras el brote del Coronavirus, debido a que este obligó a la creación de sistemas de cuarentenas que obligaron a las personas a permanecer en sus viviendas, a no utilizar vehículos y a no asistir a sus lugares de trabajo en las fabrica; por lo cual los requerimientos de energía descendieron y con ello la contaminación del aire por el dióxido de nitrógeno (NO2).
En las imágenes también se mira este reflejo en la ciudad de Wuhan en China, el cual fue el epicentro del brote. Las imágenes muestran una gran disminución de la contaminación del aire debido a que el 23 de enero de 2020, las autoridades chinas habían cerrado el transporte que entraba y salía de Wuhan, así como las empresas locales, para reducir la propagación de la enfermedad; esto de alguna forma ha reducido la actividad industrial de forma drástica y con ella a bajar los niveles de dióxido de nitrógeno (NO2).