Un destello de luz en el cielo le ha brindado la oportunidad a un grupo de investigadores de la Agencia de la Aeronáutica y el Espacio norteamericana (NASA), para que descubrieran la mayor explosión jamás registrada en el universo.
Según lo informó la NASA, gracias a la utilización de datos obtenidos por medio de la combinación de datos del Observatorio de rayos X Chandra de la NASA y XMM-Newton de la ESA, y datos de radio del Murchison Widefield Array (MWA) en Australia y el Radiotelescopio Giant Metrewave (GMRT) en India; han podido registrar una gigantesca y récord explosión proveniente de un agujero negro en un cúmulo de galaxias ubicada a cientos de millones de años luz de distancia de la tierra.
Los astrónomos registraron esta explosión exactamente en un agujero negro supermasivo que se encuentra en la galaxia central del cúmulo de galaxias llamado Ophiuchus, el cual se encuentra ubicado a unos 390 millones de años luz de la Tierra. Los científicos creen que el gigantesco estallido ha sido el producto de una expulsión de cantidades prodigiosas de material y energía, desde el núcleo del embarazo.
Al igual, los astrónomos han explicado que esto pudo ocurrir gracias a que un grupo de material espacial cayo hacia el agujero negro y este lo redirigió a choros, logrando así que esta materia colisionara con otros materiales circundantes y generando esta megaexplosión que se ha convertido en la mayor explosión registrada en el universo.
Crédito de imagen principal: Agencia Espacial Europea y Justyn R. Maund (Universidad de Cambridge).