Siempre se había pensado que todos los seres vivos en la tierra necesitaríamos indispensablemente el oxígeno para sobrevivir, pero una reciente investigación ha descubierto un microorganismo que está haciendo que nos replanteemos esta idea de la indispensabilidad del oxígeno para la vida ya que este no lo utiliza para mantenerse vivo.
La investigación publicada en la revista norteamericana de divulgación científica PNAS, fue realizado por investigadores de la Universidad de Tel Aviv en Israel; los cuales han descubierto un parásito parecido a una medusa, el cual no tiene un y no utiliza el oxígeno para vivir, es decir, el microorganismo no respira al vivir toda su vida sin la dependencia del oxígeno.
El microorganismo parásito que se le ha llamado “Henneguya salminicola”, es un cnidario, que pertenece al mismo filo que los corales, medusas y anémonas. Sin embargo, este microorganismo no vive en el agua marina sino dentro de la carne de los peces salmónidos o salmones durante todo su ciclo de vida.
Para descubrir este organismo que no necesita del oxígeno para vivir, los investigadores decidieron realizar secuenciación profunda y microscopía de fluorescencia para realizar un estudio minucioso secuenciación profunda y microscopía de fluorescencia para realizar un estudio minucioso de Henneguya salminicola y al final descubrieron que este ha perdido su genoma mitocondrial y la capacidad de respiración aeróbica. Algo fascinante e increíble que hasta el momento no se consideraba posible ya que el microorganismo también ha perdido la capacidad de respiración aeróbica y casi todos los genes nucleares involucrados en la transcripción y replicación de las mitocondrias.
Los investigadores creen que de alguna forma el parásito evolucionó escondido dentro de su huésped y ha aprendido a vivir bajo condiciones bastante hipóxicas dentro del cuerpo de este sin la necesidad de procesar el oxígeno para vivir. Algo que a su vez replantea nuestra compresión de la vida en el universo y nos replantea sobre la posibilidad de encontrar otras formas de vida fuera de la tierra que no dependen del oxígeno para vivir.
Imagen superior. Vista bajo el microscopio del parásito Henneguya salminicola. Créditos: Stephen Douglas Atkinson.