Uno de los lugares mas incognitos de Asia para los visitantes de este continente y al mismo tiempo para los propios residentes de el, es el templo “Taktshang” conocido popularmente como el “nido del tigre”; el cual sorprende a las personas por su extraña ubicación sobre las laderas de un empinado acantilado y su extraña belleza que esta ubicación le confiere.
Taktshang se encuentra en Bután, el cual se localiza en un acantilado a 3120 msnm (700 metros hasta fondo del valle). El nombre significa Nido del Tigre. El monasterio es un importante lugar sagrado para el Budismo himalayo e incluye siete templos. Está situado en un acantilado del valle de Paro. El complejo se comenzó a construir en el año 1692 en las inmediaciones de la cueva donde se cree que meditó el Gurú Padmasambhava durante tres años, tres meses, tres semanas, tres días y tres horas en el siglo VIII. Padmasambhava fue quien introdujo el Budismo en Bután y es la deidad tutelar del país.
En la actualidad el templo Taktshang se encuentra en restauración debido a los daños de un reciente incendio. El acceso al mismo es sólo a pie o mula. Paro Taktshang es el más conocido de los treinta taktshangs o “nidos de tigre” en las que meditó el santo.
Antecedentes y leyendas
De acuerdo a la leyenda de este Taktshang [que en lengua Tibetana se escribe (stag tshang), que significa literalmente “guarida de tigre”], el Gurú Padmasambhava voló hasta este lugar desde el Tíbet a lomos de una tigresa. Este lugar fue consagrado al amansamiento del demonio tigre.
Una leyenda alternativa sostiene que una esposa de un emperador, conocida como Yeshe Tsogyal, se convirtió en discípula del Gurú Padmasambahva en el Tíbet. Ella se transformó en una tigresa y llevó al Gurú desde el Tíbet hasta Bután. En una de las cuevas del lugar el Gurú estuvo meditando y emergió en ocho encarnaciones, por lo que el lugar se convirtió en sagrado.