El galardon a la investigación científica en el campo de la química este año (Premio Nobel de Química 2017) ha sido galardonado a los científicos Richard Henderson, Joachim Frank y Jacques Dubochet, por su gran trabajó en el desarrolló de la microscopía cryoelectrónica, lo cuál ayuda a los investigadores a ver cómo son las biomoléculas.
La microscopía cryoelectrónica (cryo-EM), es una técnica que dispara haces de electrones en proteínas que han sido congeladas en solución, para deducir las estructuras de las biomoléculas.
Por medió de la microscopía electrónica, la muestra se estudia con aparatos electrónicos y en algunos campos a temperaturas criogénicas, evitando así la generación de artefactos. Se trata de una técnica muy utilizada en biología estructural, pues permite observar directamente (sin tinciones ni fijaciones) estados conformacionales nativos a resolución actomica y molecular.
Durante décadas, los biólogos han utilizado la cristalografía de rayos X – rayos X de chorro de arena en las proteínas cristalizadas – a la imagen de las estructuras biomoleculares. Pero los laboratorios ahora están corriendo para adoptar el método crio-EM, porque se puede tomar imágenes de proteínas que no pueden formarse fácilmente en grandes cristales.
La real academia de ciencias de Suecia sostiene que la novedosa herramienta que ha revoluciodado el mundo de la investigación química le ha permitido un gran avance a esta ciencia lo cual la a trasladado la bioquímicloa una nueva era, por lo cuál se les otorgó el máximo galardón en la quimica a estos científicos.