Los incas utilizaban medidas exactas para la construcion de muros y columnas en sus ciudades antiguas.
Hoy en día nuestra civilización avanza a pasos gigantescos sobre el universo, hemos salido de nuestra esfera habitable y nos hemos adentrado en el universo profundo. Nuestras naves se impulsan hacia el espacio rompiendo toda fuerza de contracción para descubrir lo desconocido y darle un poco de luz a nuestra cuestionada curiosidad. Hallazgos recientes y del pasado nos muestran que al igual que nosotros otras civilizaciones tuvieron grandes avances en medicina y tecnologías en las comunicaciones y espaciales.
Los egipcios median con exactitud el tiempo, así como los mayas y los persas; Tenían un conocimiento amplio de nuestro sistema solar y estaban seguros de que en el universo existían otras formas de vida con conocimientos muy superior a los nuestros a los cuales llamaban dioses y creadores. Es un gran misterio realmente cada uno de los hallazgos que encontramos de esas antiguas civilizaciones.
Guerras sangrientas, cambios climáticos, pestes y situaciones extraordinarias provenientes del espacio, son las explicaciones que todo mundo da cuando nos preguntamos cómo es que desaparecieron decenas de civilizaciones que marcaron el rumbo de la historia de la humanidad. Hablamos de civilizaciones con gran conocimiento tecnológico para su época, civilizaciones como:
La Atlántida.
El filósofo Platón fue el primero en hablar de la tierra de la Atlántida y su civilización que existió hace más de 12 mil años; una tierra que se localizaba en el Mar Mediterráneo y que desapareció abruptamente por un fuerte terremoto que originó un terrible tsunami, el cual terminó por arrasar con todo lo que había sobre la tierra, inundándola por completo la gran ciudad de la Atlántida.
Las investigaciones sugieren que los habitantes de aquel lugar eran superiores en cuanto a cultura y conocimientos tecnológicos respecto a otras sociedades de su época; hay quienes se han atrevido a decir que eran extraterrestres y que de ellos descienden el resto de las más grandes civilizaciones de la historia. También sugieren que la ubicación de la Atlántida les permitía tener contacto con mayas y egipcios, con quienes tuvieron contacto, compartiendo con ellos sus conocimientos. Otras investigaciones plantean que esta civilización denominada “Raza de Gigantes”, realizaba trasplantes médicos, utilizaban la energía nuclear, poseían vehículos y barcos voladores y que, incluso, pudieron viajar a la Luna en medio del desastroso final de su ciudad.
Es un verdadero enigma la desaparición de esta avanzada sociedad. Hasta ahora su existencia es una fuerte discusión entre la comunidad científica, lo inusual son las huellas que se encuentran en el fondo del mar y los fenómenos encontrados en el triángulo de las bermudas, hechos que se relacionan con la existencia de esta civilización.
La civilización del Amazonas.
En la década de los 80, el geólogo y palentólogo Alceu Ranzi, sobrevolaba la región del Amazonas cuando de repente, observó varios círculos trazados en el suelo, abriendo la especulación sobre posibles seres extraterrestres. Varios años después, en 1999, volvió a la zona y desde un avión encontró otras figuras geométricas perfectas. Ranzi, estudió el sitio y encontró que, debido a la deforestación y sequía de aquella zona cercana a Bolivia, podían observarse estas grandes líneas que, en efecto, tenían formas geométricas interconectadas entre sí, lo que pudieron haber sido carreteras y caminos de riego.
Según las investigaciones, fueron hechas por una comunidad que habitó en el lugar antes de la llegada de los españoles y que poseían conocimientos avanzados de agricultura y ganadería. En el sitio, también se han encontrado vestigios de cerámica y otras piezas que indican la presencia de grupos humanos en el lugar, con una mentalidad superior a la de los grupos que actualmente viven en la región. La desaparición de este pueblo es un misterio hasta ahora, se plantea la hipótesis de que pudo ser exterminado por los españoles al transmitirle enfermedades europeas para las cuales el cuerpo de los habitantes del continente americano de esa época, no tenían defensas en su sistema inmunológico. Sea cual sea la verdad sobre la desaparición de este pueblo solo podemos sujetar hasta ahora la idea de que desapareció de una forma desastrosa.
Los Anasazi.
Los Anasazi era un grupo étnico amerindio que ocupó la región que actualmente son los estados de Colorado, Utah, Arizona y Nuevo México, en los Estados unidos; los cuales vivieron mucho tiempo antes de la llegada de la colonia española al continente. Se sabe de su existencia gracias a diversas construcciones que hoy son patrimonio mundial por la UNESCO.
Los anasazi gustaban de asentarse en acantilados y sus casas estaban orientadas de tal manera que en invierno no sufrían por la lluvia y la nieve, así como del calor en el verano. Algunas construcciones son de adobe, mientras que otras de ladrillo; se dedicaban principalmente a la agricultura, utilizando técnicas de riegos avanzadas. Tenían altos conocimientos con el manejo de la cerámica y también con los tejidos. Hacían joyas, almacenaban el cultivo para comercializarlo y también eran ganaderos. El porqué de su desaparición sigue siendo un misterio. Algunos hallazgos en pintorescas cuevas en las zonas donde habitaron los anasazi los relacionan con seres extraterrestres a los cuales se les llamo los hombres hormigas debido a que construían ciudades subterráneas.
La civilización de Osiris.
Este grupo humano surge de las teorías conformadas por Shirley Andrews, una investigadora que durante años ha estudiado acerca de la Atlántida. Según Andrews, varios pobladores de aquella tierra desaparecida se refugiaron en Egipto, para ser más exactos a orillas del lago Fayum, encontrándose con personas autóctonas, con quienes entraron en contacto y a quienes decidieron civilizar.
Se cree que el líder de los Atlántidas era precisamente Osiris, dios egipcio relacionado con la resurrección, fertilidad y agricultura. Pronto, la civilización de Osiris sería una de las más educadas y con mayor progreso de las existentes, sentando las bases de lo que serían los egipcios que marcaron grandiosas épocas. De hecho, se cree que bajo la pirámide de Gizeh, se encuentran los texotso que comprueban la existencia de esta avanzada sociedad. Su desaparición, así como la verdad sobre su existencia es un gran misterio.
Los Incas.
Se le considera como uno de los imperios más extraordinario que existieron en América. Se encargaron de desarrollar una arquitectura altamente funcional, la cual se caracterizó por las técnicas avanzadas de ingeniería; sus ciudades estaban constituidas por calles y avenidas perfectamente trazadas y sus edificios tienen una gran precisión.
Además, poseían y echaron a andar un sistema de riego sumamente adelantado a sus tiempos, y tenían conocimientos astronómicos superiores al resto de las civilizaciones que vivieron en la misma época. Fueron exterminados a mediados del año 1537 con la llegada de los conquistadores españoles a la región. Frecuentes enfrentamientos entre estos y las epidemias desfavorecieron a los incas, los cuales fueron muriendo hasta desaparecer. Puedo ser uno de los exterminios humanos surgidos durante la época de la conquista más desastrosos y triste realmente.
Los Tartesios.
Los egipcios denominaron de esta manera a quienes consideraron los primeros pobladores de Occidente. Este grupo humano se desarrolló en la península ibérica, en el territorio que actualmente está conformado por Sevilla, Huelva y Cádiz.
Herodoto fue el primero en hablar de los tartesios, quienes se regían bajo una política sumamente estructurada; tenían su propia lengua, una escritura avanzada, eran expertos en el arte de la metalurgia, excelentes ganaderos y comerciantes. Tartessos desapareció abruptamente de la historia: a partir de la batalla de Alalia no hay más referencias escritas. Una de las posibilidades es que fuera barrida por Cartago tras su victoria sobre los griegos para hacerle pagar así su alianza con éstos. O por Gadir, metrópolis fenicia que podía ambicionar el control del comercio de los metales. O quizás por los pueblos de la meseta.
Pero también se han dado explicaciones de carácter económico: al conseguir Massalia acceder por tierra a las fuentes de estaño británicas y el mismo Gadir llegar a ellas por mar, el monopolio tartésico se derrumbaría, lo que habría provocado una caída en picado de los ingresos y toda una serie de consecuencias internas que llevarían a la decadencia interna del reino y a su disolución. Asimismo, se ha considerado la posibilidad del agotamiento de las vetas de minerales, fuente principal de su riqueza comercial. De cualquier manera, los centros de poder político-económico se desplazaron hacia la periferia del área tartésica, concentrándose en oppida como Carmona o Cástulo, que darían lugar a los estados iberos turdetanos.
Los Roanoke.
Roanoke, es el nombre una isla que en la actualidad se encuentra frente a las costas del estado de Carolina del Norte, en los Estados Unidos. En 1586 llegaron a este lugar 75 ingleses que pretendían establecer las bases de una colonia, encontrándose con un grupo de nativos que no permitieron su establecimiento.
Sir Walter Raleigh, fue enviado tiempo después a intentar asentarse de nuevo en Roanoke. El colono llegó con 117 personas, incluidos el artista John White, su hija y su yerno. White tuvo que regresar a Europa por víveres y por cuestiones de guerra no pudo embarcarse sino hasta tres años después. Al llegar a la isla, John se encontró únicamente con los restos de los asentamientos, sin que ahí hubiera ni una sola persona. Las teorías dicen que pudieron haber sido aniquilados por otras tribus o por españoles, que intentaron volver a Inglaterra perdiéndose en el océano, o bien, que adoptaron la forma de los Croatoan, una tribu que se mostró amigables con ellos a su llegada. Su desaparición dio origen a su sobrenombre de “La colonia perdida”. Hasta hoy siguen sin hallarse pruebas definitivas sobre el destino final de los colonos.
El Valle de Indo.
Entre los años 2350 y 1750, se asentó en este valle de la India una cultura cuyos vestigios pueden observarse a través de dos grandes centros ceremoniales, el Mohenjo-Daro y Harappa. Lo característico de esta civilización es su arquitectura, ya que trazaron y levantaron edificios de manera perfecta, dejando a un lado la grandeza y el diseño para prevalecer la cuestión funcional.
Se dedicaban también a la agricultura y trabajaban con diferentes metales, siendo así la orfebrería otra de sus actividades principales. Se cree que su desaparición se debe a cambios climáticos ocurridos alrededor del año 1500.
Los Vetones.
Eran una tribu celta del siglo octavo, los cuales vivían en el oeste de la Península Ibérica. Se sabe que era un pueblo guerrero, lo cual se observa en los vestigios arquitectónicos que aún quedan en pie, pues sus construcciones están rodeadas de imponentes murallas.
Se dedicaban primordialmente a la recolección, agricultura y pastoreo; su estructura económica era piramidal, en donde la milicia ocupaba el sitio privilegiado. Su máxima expresión artística fueron los verracos con forma de animales. La civilización como tal desapareció con la llegada de los romanos al sitio, en donde tuvieron que adaptarse a una nueva forma de vida.
Los vinca.
Es la cultura más antigua de toda Europa de la cual se tenga registro. Se asentaron en todo lo largo y ancho del Río Danubio, así como en varias zonas de Europa Central y Asia Menor. Lo más característico de esta civilización es el trabajo realizado con cerámica y las piezas hechas con barro; la mayoría son máscaras que parece hacen referencia a los dioses que ellos idolatraban.
La población vivía organizada en pequeñas ciudades las cuales subsistían gracias al comercio de cinabarita, un pigmento que tenía uso medicinal y era materia prima en la producción de tinturas. También fueron muy hábiles en el manejo de metales. Hasta ahora, no se sabe cuál fue la causa de su extinción.
El conocimiento de nuestro planeta, su historia y cada uno de los factores ligados al desarrollo humano es vital para el cuidado del mismo, por medio de las acciones responsables y amigables con el medio ambiente. Ama la vida y cuida de ella, todos somos parte de este planeta.
