Las islas coralinas oceánicas o atalones son refugios para la vida marina y lugares donde las aves encuentran reposo y sitios de anidamiento. Son lugares propicios para la protección de la vida.
El atolón Kure forma parte de las islas de Sotavento de Hawái. Está situado en el extremo oeste del archipiélago, a 91 km al oeste de Midway. Sus coordenadas son: 28°25′N 178°20′O. Kure es el atolón más septentrional del mundo. Está cerca del que se llama “punto Darwin”, la latitud donde el crecimiento de los arrecifes de coral es igual a las fuerzas que provocan su erosión. Tiene una forma casi circular de 10 km de diámetro. La altitud máxima es de 6,1 metros. Sólo hay dos islotes significativos al sur del arrecife, Green Island y Sand Island, formando una superficie total de 0,86 km².
El nombre Kure se le dio ha este Atalón por el capitán ruso Kure, que lo descubrió en 1827, con el barco Moller. Los registros historicos de esta isla coralina está llena de naufragios y rescates. Un naufragio muy recordado ocurrió en 1837, el capitán Brown con el barco inglés Gledstanes naufragaron en estas aguas. Durante cinco meses sobrevivieron en el islote Green. Con los restos del naufragio construyeron una barca que llegó a Honolulú donde el cónsul británico organizó el rescate. En 1843 se repitió la misma historia con el ballenero norteamericano Parker. En 1870 la expedición norteamericana del USS Saginaw, que había ido al atolón Midway, decidió explorar Kure por si encontraba algún náufrago. Se estropeó el motor y se estamparon contra los arrecifes. Cinco voluntarios hicieron el viaje en barca hasta Kauai, pero llegaron tan extenuados que volcaron en la playa y sólo sobrevivió uno.
La ultima isla coralina o más conocido como el atalón Kure ha tenido la intervención del hombre. En 1886 el rey Kalakaua la tomó en posesión por el reino de Hawái con el nombre de Moku Papapa. Construyeron un refugio con provisiones para los posibles náufragos. Durante la Segunda Guerra Mundial se construyó una base militar y una estación de transmisión de radio para la navegación, pero aun sigue con sus limitaciones para el hombre generadas por su posición geográfica y un lugar con una rica biodiversidad.
Por ser la isla coralina más septentrional del planeta es también un refugio para la vida marina, su distancia de los pueblos le ha ayudado a conservar una gran biodiversidad que se puede afectar con los graves efectos que esta produciendo el cambio climático.
La protección del medio ambiente y los lugares que se han conservado por su posición geográfica es una estrategia que le ayudara al hombre en la preservación de la vida en la tierra.